Podas: Existen 3 tipos de podas:
Poda de Formación: consiste en cortar hojas, ramas débiles, sobrantes y entrecruzadas por debajo de los primeros 40 centímetros de la planta, dejando seis a ocho tallos basales, de los cuales dos deben ser vegetativos o machos que se cortan 10 a 20 centímetros por encima del primer alambre y los cuatro restantes productivos o hembras, haciendo los cor
tes por debajo o cerca al último alambre. Esta poda se debe realizar 45 o 60 días después de la siembra.
Poda de Mantenimiento o Sanitaria: se busca eliminar todas las ramas que presenten síntomas de enfermedades, leñosas, secas y las que ya terminaron la producción, así como las ramas látigo
o improductivas. En tanto que las ramas productivas se deben despuntar para estimular el crecimiento de ramas secundarias, no olvidar mantener la parte baja de la planta libre de hojas y ramas sobrantes. Esta poda se debe realizar cada 15 a 30 días.
Poda de renovación: Se lo realiza cuando la planta esté vieja y sus rebrotes no presenten la capacidad para la producción; esta se realiza a ras del suelo, o parcial cuando sus ramas hayan agotado su capacidad productiva. Esta poda busca mejorar la productividad y la calidad de los frutos y se debe adelantar después del pico de producción.